¡EMPIEZA LA
TEMPORADA DE INVIERNO!!
Una vez
acabada la temporada de verano, debemos preparar nuestra piscina para su
hibernación, con el fin de facilitar la engorrosa recuperación para la
siguiente temporada. Sí, entendemos que falta un año…pero no debemos perder un
día de baño porque nuestra piscina está desastrosa.
El agua es un
bien escaso, y la hibernación es una fantástica alternativa que nos permite la
conservación del agua. Además el proceso de hibernación nos ayuda a alargar la
vida media de la instalación y de los equipos y un ahorro en el consumo de agua
al evitar el vaciado y necesidad de reposición al inicio de la siguiente
temporada.
En definitiva,
todo son ventajas!